martes, 15 de marzo de 2011

Cap. Décimo Segundo. Vacía

No podría decir que fue el beso de mis sueños, pero creo que fue bastante lindo.

De repente me alejó un poco, pero apenas, todavía podía rozar sus labios.

- Me gustas mucho ¿Sabes?- dijo con una sonrisa chiquita, pero muy notable, y volvió a acercarme

- También me gustas mucho- que chica inteligente, ¿otra cosa no se me iba a ocurrir?

Tendría que haber cerrado la boca y acercarlo más a mí.

Estaba por despedirme cuando salió mi mamá preocupada de por que tardaba tanto. Cuando nos vio abrazados, nos sonrío y volvió a entrar rápidamente.

- Creo que voy a entrar, seguro me va a empezar a llover…

No termine la oración que volvió a besarme, me soltó a la fuerza; por que parecía que una parte de él no quería soltarme y la otra decía que tenía que hacerlo. Y se fue, despacito, mirando hacia mi cada tres pasos que daba.

- Te quiero- llegue a leer las palabras silenciosas que salían de su boca. Lo saludé con la mano y entré.

Entré y fuí directamente a mi habitación, en el trayecto me lo encontré a mi papá…

- ¿Y? ¿Quién es este chico?- preguntó con los brazos cruzados sobre el pecho, poniendo ese tonito de autoridad.

- Un amigo, con el que salí hoy y con las chicas

- Ah, ¿así que comparten el novio?- yo no lo podía creer ¿Era un chiste, no?

- No, papá- respondí cortante, haciendo sonar con más fuerza el “no”-. Salimos con dos chicos más.

Me miró con cara de poco amigos, y subí a mi habitación rápidamente, cerrándola de un portazo.

Me tiré en la cama, furiosa ¿Cómo se le iba ocurrir decir eso? Esperaba un “¿y de donde lo conoces?” O algo por el estilo, pero lo que dijo me dejó sorprendida, verdaderamente.

Después me quedé, tirada en la cama, vacía, si, esa es la palabra, vacía, no sentía nada.

Vacía, en mi cabeza giraba solamente esa palabra… Vacía.

No hay comentarios: